Hoy no es tiempo de callarse la boca, de aferrarse al miedo o de permitir que nos compren con cuatro duros, la verdad está presente, muy presente desde que el PSOE de Benalup-Casas Viejas entró en el Ayuntamiento, en su cúpula de cristal, sólo de cristal.
Aunque tuvieramos una venda en los ojos, sería imposible no ver la realidad:
Comprar votos puede rozar la ilegalidad, el precio que se paga es evidente, tratos de favor hacia unos e ignorancia hacia aquellos que piensan de un modo distinto, que sepamos la obligación de un Ayuntamiento es la de llevar a cabo un trato igualitario con todos sus ciudadanos.
Los tratos de favor no deben permitirse jamás, como tampoco la elección de trabajadores a dedo, un puesto público ha de estar al alcance de cualquier persona capacitada para desempeñar el puesto pertinente y de ser así, ante un jurado totalmente neutro.
Una bolsa de empleo no debe verse limitada por la edad, una persona de 35 años puede necesitar el trabajo tanto como aquel que tiene 55 años.
Muchas personas no nos vamos a dejar comprar por un alta de 3 días para poder echar el paro, ni mucho menos por estar 7-8 días trabajando en las calles, sólo queremos ver las cosas claras, como tampoco es momento de luces de navidad, en este pueblo hay gente que la única lumbre que tienen es una vela. No es momento de presentar a un pueblo con un vestido de estrellas, cuando sus habitantes están estrellados.
En Benalup-Casas Viejas hay gente con ganas de cambiar ese modo de hacer las cosas, la gente quiere participar, pero cuando no se les permite hacerlo, es lógica su indignación a todo aquello que se haga llamar política.
Benalup-Casas Viejas merece igualdad, ya estamos cansados de los habituales tratos de favor y de no enterarnos de lo que se cuece en ese casa a la que llaman "Casa del Pueblo".